EL DÍA. El gran día. Para cualquiera que componga canciones el día de la presentación de su primer disco es el día más importante que puede haber. Y creo que esto es comprensible incluso si no compones. Porque conciertos hay muchos, y todos son importantes… pero una presentación es el día en el que el viaje que has iniciado llega a su destino.
Esta travesía, además, pasó por varias fases. Creo que merece la pena contar la historia. Todo empezó en 2019, cuando fui grabando y mezclando cinco canciones para un EP que debía haber salido en 2020. Con estos cinco temas y los singles ya tendría suficientes canciones para recopilarlas en un álbum (que era la idea cuando empecé a publicar mis temas en 2018), así que pensé en publicarlo en CD y darle el formato que merecía. Y ya que tiraba la casa por la ventana, podía montar una banda para presentarlo en condiciones. Y así fue.
El primer y único ensayo fue el 12 de marzo de 2020… y el 14 nos vimos encerrados por una pandemia mundial. A la espera de que pronto pasara todo (iluso), decidí esperar. Podría haber subido los temas en esos días, ya que todo el mundo tenía todo el tiempo del mundo para escucharlos, pero preferí esperar a poder presentarlo. Y la pandemia se fue alargando… cuando por fin volvieron los conciertos, lo hicieron en un formato reducido. Y decidí seguir esperando el momento oportuno…
Esto hizo que los temas fueran envejeciendo. Ahora encontraba pequeños fallitos que podría grabar mejor, incorporar otro arreglo, probar otra cosa… Y al final decidí reiniciarlo todo. En este proceso, entre 2021 y 2022 empecé a ir a los micros abiertos, sobre todo al de Libertad 8, lo cual supuso un renacer para mí. De eso ya os he hablado, pero lo importante de esta etapa es que surgieron varios temas que la gente me pedía que incluyera en el disco y saqué otros del cajón que descubrí que se lo merecían también. Ya no tenía 5 canciones “nuevas”: tenía 10. El disco acababa de tomar otra dirección.
En octubre de 2023, aprovechando el final de un trabajo y a la vuelta de un Camino de Santiago que me cambió la perspectiva de muchas cosas, me pongo manos a la obra para quitarme la espinita del disco. Era algo que tenía que hacer, fuera o no el momento, y no iba a quedarme más tiempo esperando. En un par de meses lo había acabado. Y el pensamiento que tuve al principio de esta historia volvió: “la ocasión lo merece, debes darle formato, haz un CD que valga la pena y quede testimonio de esto”.
Y eso me llevó a la siguiente locura: una campaña de crowdfunding para poder llevar esto a cabo. 40 días de sangre, sudor y lágrimas, dando la brasa, yendo a todos los micros que pude, con un accidente familiar que también me quitó bastante tiempo… Hubo bastante presión, pero las cosas cuando tienen que ser, son. Y salió adelante. Ahora tocaba dirigir el barco hacia el 2 de marzo, fecha que había reservado para presentar el disco (físico o digital) en Libertad 8. No podía ser en otro sitio. Julián me ha brindado muchas veces la oportunidad de tocar allí, de crecer, y de su micro abierto han salido varios de los temas que van en el disco. La historia tenía que terminar en casa.
Para redondearlo, me quise quitar otra espinita. Llevaba mucho tiempo con la idea de hacer un concierto conjunto con mi amigo Endika Delaia, y una vez le dije “cuando presente el disco quiero que sea un día grande; ¿bajarías ese día a Madrid a actuar conmigo?”. Y no se lo pensó. Desde Vitoria que vino con su familia a tocar un repertorio antes de mi concierto y una versión de “Aunque tú no lo sepas” que compartimos al piano y la guitarra. Un detallazo que no voy a olvidar, amigo. Tenerte allí fue uno de los muchos regalos que me dio este día.
Y empieza el concierto. Muchos amigos entre el público, otros en el streaming compartiendo la intensidad del momento desde la distancia y mi familia al pie del cañón. ¿Qué más puedo pedir? Sin duda, si es verdad lo que dicen de que antes de morir vemos diapositivas de nuestros momentos más importantes, este día va a estar entre ellos, fijo. Por fin me quitaba la espinita. Por fin saldaba mi deuda con estas canciones. Pase lo que pase, ya he llegado hasta aquí. Y esto no habría posible sin todos los que habéis estado a mi lado y me habéis ayudado a sacarlo adelante. Ahora toca hacer todo el ruido posible para que el mundo se entere de que el disco ha salido. ¡Empieza otro viaje!